En un esfuerzo por enfrentar la crisis del agua y garantizar el derecho de este recurso, se ha decidido implementar de forma obligatoria sistemas de captación de agua de lluvia en la Ciudad de México. Esta iniciativa, recientemente aprobada por el Congreso y elevada a rango constitucional, priorizará zonas sin infraestructura adecuada para el suministro de agua.
¿En qué consiste la captación de agua de lluvia?
La captación de agua de lluvia consiste en acopiar y almacenar el agua de lluvia para su uso posterior. El agua se recoge de techos y superficies acondicionados para este fin, para llevarla a cisternas o depósitos a través de tubos y filtros. Este tipo de recolección sirve para obtener agua potable, para ser distribuida especialmente en áreas de escasez.
Iniciativa Histórica en la Ciudad de México
El objetivo principal de esta medida es aprovechar al máximo las precipitaciones, entre otros factores, debido a que el cambio climático y la urbanización han afectado la disponibilidad de agua potable. Con estos sistemas, se busca mejorar el acceso al agua en comunidades vulnerables y promover un uso sostenible del recurso.
La preocupación creciente por la escasez de agua impulsó esta iniciativa. El Congreso de la Ciudad de México, al aprobarla, destacó la necesidad de garantizar el acceso al agua para todas las personas según la Constitución de la CDMX. La captación de agua de lluvia es una solución viable y sostenible para aliviar la presión sobre fuentes subterráneas y los sistemas tradicionales de distribución.
Entre las acciones que se emprenderán están:
- Instalar sistemas de captación en edificios públicos, viviendas y nuevas construcciones.
- Realizar campañas de concientización a la población sobre la importancia y funcionamiento de estos sistemas.
- Implementar programas de incentivos y subsidios para facilitar su instalación.
Además, el gobierno de la CDMX colaborará con organizaciones y expertos para asegurar una instalación eficiente y de calidad. Se espera que esta medida mejore la calidad de vida de miles de capitalinos y sirva como modelo para otras ciudades del país y de América Latina.
La medida de implementar sistemas de captación de agua de lluvia tomada por el Gobierno de la Ciudad de México representa un paso significativo hacia la sustentabilidad y la garantía del derecho al agua, abordando uno de los desafíos actuales más críticos.